1000 RAZONES PARA VIVIR ENOJADO

Bien, las personas me preguntan, que tengo yo en contra de todo el mundo. ¿Por qué siempre estoy de mal genio?, ¿porque soy grosero?, ¿porque siempre llevo la contraria? ¿Por qué siempre pregunto? y es que, desde que era un niño recuerdo muy bien, ellos decían sentado y yo decía de pie. Ellos decían detente  y yo decía adelante. Soy a estas alturas de la vida, producto de la contrariedad estructural del bien y del mal. 

Soy simplemente la respuesta a todo lo que veo, y tal vez los demás no logran ver, o algunos sí. Si te das cuenta y analizas un poco la historia, si ves todo con ojo de lupa, nuestra historia esta manchada con odio, guerra y sangre derramada por querer hacer el bien. Por qué el bueno tiene poder, y el malo solo se tiene a sí mismo. Su sagacidad. La ambición del ser humano por el poder, ha hecho que las personas se vuelvan seres detestables. Chismosos, hipócritas, envidiosos, pedantes y autoritarios. Solo por tener poder. Hablaran mal de ti para quedar bien ellos, te desearan el fracaso donde ellos quisieran triunfar, y vendrán con una sonrisa en la cara para que les cuentes todo el rollo de tu vida personal, para después hacerte sentir mal como persona.

 Desearan volverse los dueños de tu voluntad, de tu espíritu, querrán decirte que está bien y que está mal Desde pequeño. Desearan controlar tus acciones, para que tú no controles las de ellos. Te harán sentir mal por cada decisión que tomes, y  mucho peor  te sentirás cuando acudas a ellos por ayuda. Es que contarle las cosas a otra “cosa” es un error.  Y ellos son los buenos! Es increíble, en este texto no voy a dejar preguntas hipotéticas y al demonio con todo eso de la tesis, solo escribiré la verdad. Bienvenido a esta cárcel con adornos para la mente. La televisión, la radio, el internet, la prensa, todo es basura! Solo te mantienen dormido para que hagas lo correcto. Para que veas el ejemplo de lo que hacen con todas las demás personas y aquel que se revela.  Te dicen que tienes que creer en todo eso pero no te dicen por qué. Te dicen como tienes que llegar pero no te dicen a donde. Es estúpido.  Todo lo que ves puede que no sea real y lo único real son tus deseos, tus acciones. Claro, manipuladas ya por aquellos que quieren la mejor realidad para ellos. O si no ¿Qué sentido tiene, no dejar vivir libremente? 

bueno! Dicen que los seres humanos si fuésemos libres nos comeríamos los unos a los otros. Y yo me pregunto ¿acaso los que dictaminan esa condición en el ser humano, no son los mismos que quieren el poder? Claro que sí! Son ellos! Que no pierden un segundo para ponerle un ladrillo más en el muro de tu mente. Un patio más a la cárcel en la que vivimos. Pero aun así dándose cuenta de la situación, es posible vivir y hacer lo que se te dé la gana. Pero si no sabes lo que quieres jamás lo entenderás. Ahora que lo sabes puedes elegir ser uno de ellos, e investigar un poco de técnicas de manipulación mental, las religiones son las mejores. Los antros de brujería y en general todo el ocultismo te servirá. Pero yo me pregunto. ¿Será que es bueno vivir con envidia? ¿Será que es bueno ser pedante? ¿Será que mandar se siente bien? Yo no lo creo. Pero si tú, señor lector si lo crees adelante. O también puedes evitar todo eso, simplemente dándote cuenta de lo que realmente buscan las personas de ti. Y construir un anzuelo con un gusano muy gordo, para que lleguen peces grandes y jugosos y lo muerdan. Evitar a toda costa que te muerdan a ti y te coman, en este mundo te ponen a elegir entre el depredador o  la presa. Solo que los depredadores tienen otros depredadores y así. Así funciona la causalidad de la vida. Evitar a toda costa cualquier cosa que te haga sentir mal, que doblegue tu voluntad y te haga cambiar de decisión, será lo primordial que debes aprender en esta vida. Porque son nuestras acciones las que construyen la realidad. Pero en esta realidad robada, más vale ser uno de ellos o salir a la calle con tu armadura, escudo y espada. Ni depredador ni la presa. Solamente yo. No le temo a la soledad y al rechazo, temo que los que me han dejado solo y aquellos que me rechazaron, se les dé por interesarse en mis asuntos.